jueves, 4 de enero de 2007

Sopa de piedra

La historia, con muchas variantes es antigua.

Dicen que una vez un caminante, cansado de su viaje, hizo noche en una aldea muy pobre.
Los aldeanos (temerosos de tener que alimentarlo) le dijeron que no le convenía quedarse, que mejor buscara asilo en otro lugar, donde conseguiría abrigo y alimento.
El viajero les dijo que no había problemas, él se iba a preparar una rica sopa de piedra.
Intrigados por esto, algunos vecinos del lugar, se escondieron en los alrededores para espiar. El viajero puso a hervir agua en una olla grandota que llevaba. Cuando comenzó a hervir, le agregó una piedra grande. Cada tanto quitaba la tapa de la olla y olía el "aroma" que salía. Al ver esto, los aldeanos, fueron trayendo algo de lo poco que tenían. Un repollo, unas zanahorias, algunas papas, etc.
Lentamente, de la olla, comenzó a salir un riquísimo olor a sopa.
Cuando estuvo lista, el viajero les dijo a los aldeanos que trajeran sus cuencos ya que había para todos aun los que no habían podido colaborar con nada. Fin de la historia

La historia hace incapié en nuestra tendencia de aislarnos en tiempos de privaciones. No solamente en cuanto a comida se refiere. Mezquinamos amor, energías pensando que eso nos hace mas ricos, cuando es todo lo contrario.

Compartamos nuestros dones e inspiremos a los demás a hacer lo mismo.

La recompensa es un banquete que puede alimentar a muchos.

9 comentarios:

Cecilia dijo...

100% de acuerdo con esa idea!!! Ojalá muchos se entusiasmen!!!!

Compartir es un valor que no aprecia todo el mundo.Hay mucho egoismo e indiferencia.

Me encantó el cuento!!!

Besos!!!

Cecilia dijo...

Desde ya que quiero un poco de la sopa.

:)

Besos!!

Flor dijo...

Tenemos esa tendencia al egoísmo, no? Muchs muchas veces... Yo por mis pocas experiencias de vida, aprendi a no mezquinar nada, menos si se trata de amor, como dijiste vos.
Tiene que ver tambien con lo que uno este dispuesto a dar y lo que el otro este dispuesto a recibir.

El cuento está precioso. Un beso

Noelia dijo...

Que bueno es compartir, lo mucho o lo poco, es como si todo tuviera mejor sabor, mejor olor...mi deseo para este año es que la solidaridad este presente, que nos inunde a todos...

Me encanto la historia...puedo dejar comentarios...que bueno!


besos

CaboReyes! dijo...

Bellísimo relato la verdad deja pensando un rato en un mundo cada vez más difícil las mañas parecen milagros.

Alex dijo...

qué gran verdad Bea! Y qué difícil es a veces salir de ese aislamiento y hay que intentarlo, porque sino se termina convirtiendo en egoísmo.

BeaCriZ dijo...

todos podemos colaborar. Unos minutos de nuestro tiempo, unos centavos, nuestros conocimientos. y tanto que recibiriamos a cambio... besos

Chiru dijo...

la recompensa a veces es la sola satisfacción de recibir una sonrisa a cambio

BeaCriZ dijo...

Chiru!!. Gracias por tu visita. Si, es así, pero son sonrisas que te entibian el alma, no? Besos